
Vidrio Templado
El templado
térmico es el tratamiento más convencional y consiste en calentar el Vidrio
hasta una temperatura próxima a la de su reblandecimiento para, a continuación,
enfriarlo bruscamente, haciendo incidir sobre su superficie aire más frío y a
una presión controlada. De este modo la superficie del Vidrio se contrae
rápidamente y queda sometida permanentemente a tensiones de compresión,
mientras que el interior del vidrio queda sometido permanentemente a tensiones
de tracción. Las intensidades de estas tensiones varían de acuerdo con la
intensidad del gradiente térmico que se estableció en el momento de su
enfriamiento, con lo que se pueden obtener vidrios templados o bien simplemente
termoendurecidos.
Los Vidrios Templados presentan un notable aumento de la resistencia mecánica, una mayor resistencia al choque térmico y, por tanto, en general una mayor seguridad al uso. Se pueden realizar posteriormente manipulaciones de manufactura y serigrafiado.
Los Vidrios Templados presentan un notable aumento de la resistencia mecánica, una mayor resistencia al choque térmico y, por tanto, en general una mayor seguridad al uso. Se pueden realizar posteriormente manipulaciones de manufactura y serigrafiado.
Vidrio Laminado
Se obtiene al unir varias láminas simples mediante láminas interpuestas
de butiral de polivinilo (PVB), que es un material plástico con muy buenas
cualidades de adherencia, elasticidad, transparencia y resistencia. La
característica más sobresaliente del Vidrio Laminado es la resistencia a la
penetración, por lo que resulta especialmente indicado para usos con especiales
exigencias de seguridad y protección de personas y bienes. Ofrece también
buenas cualidades ópticas, mejora la atenuación acústica y protege contra la
radiación ultravioleta.
Vidrio Blindado
Vidrio que está reforzado por una serie de materiales que lo protegen exteriormente del impacto de balas. Los más recomendados son los fabricados con películas internas de Butiral de polivinilo (PVB).
Blindaje antibala
